Gracias HK

hk

Cuando me enviaron el mensaje me quedé helado; «cierran el HK». Todos los chavales del barrio me empezaban a enviar wasap; «¡¡cierran el HK!!», «¿Qué ha pasado?», «¿Por qué?»… Y yo no sabía que contestar; ¿El nuevo gimnasio en el barrio de las cadenas «low cost»? ¿La gran multinacional comiéndose a la tienda del barrio?

Siendo socio del HK desde los 18 años, yo también fui chaval en este gimnasio… siento una enorme pérdida con este cierre. Sin el HK nos quedamos huérfanos. Porque el HK es el sol, y los proyectos de boxeo de barrio con chavales, chavalas, asociaciones… somos sus satélites. Todo empezó en el HK, y hoy nos quedamos sin la madre, sin el padre.

¿Por qué después de haber pasado años me siguen preguntando los chavales, las chavalas por Cristian, Nano, Paco, Rex…? Pues porque para ell@s fueron SIGNIFICATIVOS. Significaron algo en sus vidas.

«Es de necios confundir valor y precio» decía Machado, y no se si el precio de mercado del HK como negocio es bueno o malo. Pero su valor para mí, los chavales y chavalas del barrio es incalculable ¿Cómo se calcula el valor de las vidas de estos chicos, de estas chicas, que gracias al HK y al boxeo fueron apartados de…?

Desde aquí GRACIAS a todos los trabajadores del HK, que han hecho un trabajo increíble con la chavalada del barrio, un trabajo que a mi parecer ha pasado injustamente desapercibido, pero que ha sido un trabajo buenísimo, desde la cercanía, la implicación, la escucha…

Siempre que la gente se pone pesimista sobre el mundo les digo; «el BIEN es mayoría, pero no se nota porque es muy silencioso». Y así ha sido el trabajo de Paco, Cristian, Nano, Rex… muy desapercibido, muy silencioso, pero tremendamente bueno.

Gracias HK por todos estos años, por abrirnos las puertas a nosotr@s, tan acostumbrados a que nos las cierren. Mil gracias

Julio

25 de noviembre de 2015

Libertad, Igualdad y Fraternidad

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«Fraternidad»; ser fraternal con el yihadista, aunque no nos gusten sus actos.

«Igualdad»; tratar con igualdad al otro, aunque ni tenga documentación ni dinero ni recursos.

«Libertad»; el ser humano libre de fronteras, aduanas, vallas…

«Libertad, Igualdad y Fraternidad» igual que el «Evangelio» son conceptos teóricos que nos dan miedo ¡hasta  terror! llevarlos a la práctica, porque en realidad tenemos pánico a la libertad, a ser fraternales con el otro, a aceptar que todos somos iguales (con documentos o sin documentos), nos aterran esas ideas, y la valla de Melilla con sus cuchillas es el mayor ejemplo del terror que provoca en nosotros «la Libertad, la Igualdad y la Fraternidad». Igual que al cristiano le aterra aplicar el evangelio, porque le aterra la sola idea de implicarse, vivir, convivir y posicionarse con «los últimos».

Por eso necesitamos ejercitos, policías, cárceles, CIES, vallas, concertinas, guerras, armas… porque nos aterra el otro, la otra, nos aterra el ser humano, nos aterra la vida.

Une barre pen

une barre pen

Hamza me indica que no hay pan para cenar. Le doy un euro y le digo que vaya él a comprar. Me dice que no, que solo no, que vaya yo con él. Yo le insisto;

– Pero si te sabes el camino a los chinos, te lo enseñó el otro día Nidia.

Pero su contestación es clara;

– No no, solo no

Supongo entonces que es por el idioma, solo habla palabras sueltas en castellano. Así que me animo, me pongo la chaqueta y nos vamos para los chinos.

Llegamos a la tienda y hay un hombre mayor en la entrada, le mira a Hamsa de arriba a bajo y nos dice;

– No iréis a robar, ¿no?

A mi me entra la risa, no se como reaccionar, no entiendo por qué nos hace ese comentario.

– No hombre, como vamos a robar a esta pobre gente

Entramos en la tienda y el matrimonio chino se queda completamente quieto. Hamsa se acerca al mostrado. El hombre le mira con terror, con cabreo… Hamsa señala el pan y dice;

– Une barre pen

La mujer china se queda completamente bloqueada, ella también habla y entiende mal el castellano. Y le contesta;

– ¡¿Qué quieres?!

– Une barre pen

– Pen – y señala al pan

– Pen, pen

La tensión es tal que entro yo;

– Está diciendo «una barra de pan» solo eso – Y señalo al pan

El hombre me mira y se relaja un poco. Como si en todo momento hubiese creído que todo lo que estaba pasando era un atraco.

Ahora entiendo por qué Hamsa no quería ir solo a por el pan. Que idiota soy.