El 13 de septiembre de 2018 la asociación vecinal de la UVA avisa a la AVS (Agencia de la Vivienda Social de la Comunidad de Madrid) propietaria del bloque en ruinas donde se encuentra nuestro local (somos lxs últimos que quedamos) donde hacemos boxeo, actividades… que los niños están habitando, jugando, en las ruinas del edificio, y que debido a lo deteriorado que se encuentra es peligroso. La policía pide a la asociación que se haga dicho comunicado; “la propietaria del edificio debe tener constancia del riesgo para que actúen en consecuencia”.
La AVS no hace absolutamente nada, no toma medidas. Deja que el edificio se vaya cayendo a cachos.
Este sábado hubo un incendio en la primera planta de este edificio en ruinas. Si las llamas llegan a alcanzar el bloque de al lado, algo probable porque en la UVA las calles son muy estrechas, hubiese prendido todo, un bloque con niños, niñas, familias…
Los bomberos lo apagaron con agua. Dejando en el local de la asociación (que se encuentra abajo) goteras y destrozos.
La AVS nos está dejando que se nos caiga el edificio encima. Y además incita a los vecinos y vecinas, con la teoría de que la culpa es nuestra porque no nos vamos. Y que por eso no se construye nuevos edificios de realojos, no se derriba los bloques en ruinas.
Nos están asfixiando, poniendo a la vecindad en contra, dejando que se nos caiga el bloque encima.
Abren nuestros barrios a las casas de apuestas y a nosotros, que hacemos una labor social gratis nos persiguen, nos castigan, nos acosan, nos ahogan, nos asfixian…